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Anfac, la patronal española de fabricantes de vehículos solicita mediante un escrito a la Comisión Europea la exención o modificación del impuesto del IVA para vehículos eléctricos con el objetivo de estimular las ventas. A su vez también negocia con el Gobierno español un nuevo plan de estímulos para la industria del automóvil que aunaría en un programa único vehículos eléctricos y de combustión.

IVA vehiculo electrico

Imagen de Green Car Reports

Para Marco Toro, consejero director general de Nissan en España, esta exención del IVA sería más "estable y definida en el tiempo" porque no depende de presupuestos generales, lo que aporta seguridad al cliente. "El monto de ayudas sería el mismo al destinado por el plan Movea pero sin que se agoten los fondos y la recaudación también será la misma porque ahora no se está vendiendo apenas, con lo que no hay apenas tributación", explicó. Toro aseguró que el propio Gobierno español "se está pensando" esta exención. "Todos los partidos políticos están de acuerdo en que hay que apoyar este mercado de vehículos limpios pero hay que ver cómo se hace", detalla.

El actual plan de estímulos para la compra de vehículos alternativos Movea tiene un presupuesto de 17 millones de euros para este año pero aún no se ha aprobado ni ha entrado en vigor. De todos modos, el sector apunta a que si se aprobara en junio, duraría hasta octubre como máximo. Las ayudas anteriores se agotaron el pasado mes de octubre y desde entonces, el mercado de vehículos eléctricos en España ha decrecido cuando arrastraba incrementos de matriculaciones de entre el 50% y el 80%. Los volúmenes aún son escasos, y solo representan el 0,3% del total de ventas de coches en España.

Nuevo plan de estímulos para el mercado automovilístico

En este sentido, el consejero de Nissan también apuntó que la patronal de fabricantes Anfac está negociando con el Gobierno un nuevo plan de estímulos para la renovación del parque automovilístico español que unificará las ayudas a la compra de vehículos de combustión con las de los automóviles limpios. Es decir, en lugar de convivir un plan PIVE y un plan Movea, el Gobierno pretende aprobar un programa de ayudas conjunto que se llamará, presumiblemente, Renova. No se conocen detalles de los fondos que se destinará a esta iniciativa pero estará muy enfocado a la reducción de las emisiones contaminantes y a rebajar la edad media del parque automovilístico. Los fabricantes pretenden que sea un plan con al menos cuatro años de duración.

Toro apunta que la modificación de la regulación del gestor de carga, la figura que se encarga de instalar los puntos de recarga del vehículo eléctrico y revender la electricidad en la carga, favorecerá también el mercado. El Gobierno está buscando la manera de simplificar esta figura porque la obligación de revender la electricidad y la cantidad de burocracia necesaria para convertirse en gestor obstaculiza que instalaciones como centros comerciales u hoteles puedan instalar puntos de recarga para ofrecerles a sus clientes que carguen su coche eléctrico durante su estancia en los establecimientos.

 

Fuente: modificado de Cinco Días.

 

 
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