Para responder a la pregunta visitamos por ejemplo la página web de IPIECA, la asociación mundial del sector del petróleo y el gas especializada en cuestiones medioambientales y sociales, fundada en 1974, para obtener una opinión o comentario acerca de la COP21. IPIECA ha preparado "The Paris Puzzle: la ruta hacia un futuro de bajas emisiones". De este material se extraen algunas conclusiones principales:
Se añade que la industria petrolera, por su carácter minero y perforador, está más que capacitada para emprender el camino CCS (Carbon Capture and Storage).
Mientras tanto, en la reciente gran conferencia petrolera de Teherán (28 y 29 de noviembre) nadie ha dicho una sola palabra sobre la COP21 de París. En su lugar, Irán ha ofrecido a los inversores sondeos y yacimientos de gas y petróleo por valor de 175.000 millones de euros. Se esperan ofertas.
¿Qué dice el carbón?
La posición de Eurocoal, la voz de carbón y el lignito en Europa, se resume así: "En la UE, el recurso energético más abundante es el carbón. En estos tiempos de austeridad y elevado desempleo, la UE puede confiar en un futuro alimentado con carbón, no el viejo y sucio carbón del pasado, sino con modernas y limpias tecnologías..." Y añade: "Dada la inconstancia de las renovables, el carbón y otros combustibles convencionales serán necesarios durante muchos años por venir".
En España, Carbunión pertenece a la Plataforma Tecnológica Española del CO2 (PTECO2) , y tiene como slogan "Coal will be green". PTECO2 también apuesta por las tecnologías CCS, que aquí se llaman de Captura, Transporte, Almacenamiento y Usos de CO2.
¿Qué opina la industria del automóvil?
La posición de ACEA (la asociación europea de fabricantes de automóviles) con respecto a la COP21 se expresa en un documento, descargable aquí. Según su resumen ejecutivo, la industria asegura que como media un coche de 2014 emitió un 33,7% menos CO2 que un vehículo de 1994, y promete para 2021 emisiones de CO2 un 41% inferiores a las de 2005. Claro que el caso Volkswagen pone en entredicho estas cifras.
ACEA apuesta por seguir este camino de reducciones graduales del CO2 emitidos por los vehículos que fabrica, dentro de un marco político estable a largo plazo y de un enfoque "comprehensivo" en el que los coches de emisión cero son una pequeña parte. En cualquier caso la industria se da todo el tiempo que haga falta para hacer lo que se supone que debe hacer, sin prisas.
La alianza Nissan Renault tiene un enfoque algo más audaz, y proporciona los 200 coches eléctricos que moverán a los 20.000 delegados de la COP21 por París. Es la primera vez en la historia de estas cumbres climáticas, ya era hora.
Fuente: señalesdeSostenibilidad boletín informativo de la Fundación Vida Sostenible.