Casi 25 estatuas emblemáticas de la ciudad de Santander han amanecido ataviadas con una bufanda, una forma de ejemplificar el impacto de los fenómenos meteorológicos extremos y su vinculación con el clima. Se trata de la iniciativa ‘Contra el cambio climático, recicla vidrio’ impulsada por Ecovidrio – la entidad sin ánimo de lucro encargada del reciclado de envases de vidrio en España y el Ayuntamiento de Santander. El objetivo es sensibilizar a los ciudadanos de la urgencia de actuar frente a la crisis climática y movilizarles por el reciclado de envases de vidrio.
En los últimos años, el número de fenómenos meteorológicos extremos se ha multiplicado según la ONU, a través del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC). El aumento de las olas de calor, olas de frío, sequías y lluvias torrenciales, son algunos ejemplos de fenómenos cuya gravedad y frecuencia se intensifican año tras año y están vinculadas a la crisis climática. Según el IPCC, la temperatura media en España ha subido 1.7ºC desde la era preindustrial y ha traído cambios, por ejemplo, en la duración del verano. Este periodo se ha alargado 5 semanas en los últimos 40 años y los episodios cálidos extremos son más frecuentes.
Ante este contexto, la acción individual y la adopción de conductas responsables es clave para mitigar las consecuencias del cambio climático. El reciclaje de envases de vidrio es un buen ejemplo de ello, ya que el uso de vidrio reciclado en la producción de nuevos envases reduce las emisiones de CO2 un 53%. Concretamente, en la ciudad de Santander, el reciclaje de envases de vidrio logró -durante 2021- evitar la emisión de casi 2.000t de CO2, el equivalente a retirar de la circulación 913 coches de la circulación.
Esto se debe a que el calcín (vidrio reciclado) funde a menor temperatura que las materias primas vírgenes y, por ello, conlleva importantes ahorros de energía y emisiones de CO2 en el funcionamiento de los hornos vidrieros. El vidrio es, además, un material circular, sostenible y reciclable infinitas veces, por lo que su separación y reciclado es clave para avanzar hacia una economía más circular y descarbonizada.
La campaña ‘Contra el cambio climático, recicla vidrio’ se ha valido de la intervención en 24 esculturas emblemáticas de la ciudad, para llamar la atención de ciudadanos y visitantes, ubicadas en los siguientes puntos:
- Monumento a Cristóbal Colón
- Monumento a San Roque
- Monumento a Hermanos Tonetti
- Monumento a Benito Pérez Galdós
- Monumento Juan de la Cosa
- Monumento a Laro el Cántabro
- Monumento a José del Río Sainz
- Monumento a Félix Rodríguez de la Fuente
- Monumento a la Sirena Varada
- Monumento a Jorge Sepúlveda
- Monumento a Gerardo Diego
- Monumento a Augusto González de Linares
- Monumento a La Sardinera
- Monumento a Guillermo Arce Alonso
- Monumento a Los Raqueros
- Monumento a Pedro Velarde
- Monumento al Incendio de Santander
- Monumento al Rey Alfonso XIII
- Monumento a Pereda
- Monumento al Cardenal Ángel Herrera Oria
- Monumento a La Quesera
- Monumento al Marqués de Valdecilla
- Monumento al Hombre con Cuevanuco
- Monumento a la Pareja de Labradores
El tejido de las bufandas conforma el código de colores usado en los mapas de aumento de las temperaturas y se han convertido en un símbolo para materializar la urgencia de actuar frente a la crisis climática. Además, para su elaboración (de forma totalmente artesanal) Ecovidrio ha contado con la Asociación de Labores Solidarias de la Asociación IAIA, organización sin ánimo de lucro que busca mejorar la calidad de vida de personas en situación de vulnerabilidad.
Para Gema Igual, alcaldesa de Santander, “nos encontramos ante un momento decisivo para el futuro de nuestro planeta y es muy oportuno desarrollar este tipo de actuaciones que coinciden con las estrategias de trabajo que se desarrollan en el municipio en favor de la biodiversidad, el medio ambiente y el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible”, ha destacado.
Por su parte, Borja Martiarena, director de Marketing de Ecovidrio, ha destacado: “Para nosotros es fundamental contar con el apoyo de Ayuntamientos como este que impulsan el cumplimiento de la Agenda 2030 y mantienen una apuesta decidida en la lucha contra el cambio climático. Esta ciudad es también un ejemplo de compromiso con el reciclado de envases de vidrio, con casi 20kg de envases de vidrio reciclados por habitante y año, se sitúa por encima de la media nacional y es la décima capital más recicladora del país. Estamos convencidos de acciones como esta son un revulsivo para afianzar el compromiso de los santanderinos con el reciclaje y la sostenibilidad.”
Durante 2021, en Cantabria se recogieron a través del contenedor verde un total de 11.594 toneladas de residuos de envases de vidrio, un 4,1% más que en el ejercicio anterior. Estas cifras sitúan la aportación de cada ciudadano en casi 19,8 kilogramos por habitante (unos 68 envases por persona). Se trata de un resultado muy positivo en un contexto de incertidumbre derivado de la Covid-19 que demuestra que la separación de los envases de vidrio continua en ascenso en España y que se trata de un hábito consolidado entre ciudadanía y profesionales hosteleros.
La capilaridad de las infraestructuras para el reciclado es fundamental para facilitar la colaboración ciudadana en la separación de envases de vidrio. Cantabria cuenta con 3.945 contenedores verdes. Los ciudadanos han depositado durante 2021 más de 100.000 envases de vidrio al día o unos 80 envases por minuto durante 2021.
Gracias al reciclaje de envases de vidrio en la región durante 2021 se ha logrado evitar la emisión de 9.260 t de CO2 y evitar la extracción de 19.160 t de materias primas (arena, sosa y caliza), un peso equivalente a 2 veces el peso de la Torre Eiffel.
La ONU ha declarado 2022, del Año Internacional del Vidrio. Este material ha jugado un papel fundamental en el desarrollo de la humanidad y ha sido crucial en el funcionamiento y la evolución de la arquitectura, la automoción, los artículos para el hogar y los envases. Hoy es un elemento esencial en sectores clave como el de la energía, la biomedicina, la agricultura, la electrónica, la información y las comunicaciones, la óptica o el sector aeroespacial, entre otros. Merece una mención especial el papel que ha jugado en la batalla contra la pandemia global de la COVID-19, actuando como envase contenedor de las vacunas a consecuencia de sus características de resistencia a temperaturas extremas y a diferentes grados de PH y acidez.
Respecto al envase de vidrio y en un contexto de emergencia climática y necesidad de una transición a una economía más circular, es especialmente destacable como material natural, circular y 100% reciclable de envase a envase.