Mil millones de personas viven en zonas montañosas y dependen de las montañas para obtener recursos como agua, alimentos o energía. A pesar de la gran importancia que poseen para esos millones de personas, las montañas se han visto afectadas por el cambio climático, la degradación de los suelos, la sobreexplotación y los desastres naturales. El 11 de diciembre se celebra el Día Mundial de las Montañas.
En 1992 se adoptó el Capítulo 13 del Programa 21 “Ordenación de los Sistemas Frágiles: Desarrollo Sostenible de las Zonas de Montaña” siendo un referente en la historia de las Montañas. Tal fue la importancia que cobraron las montañas que en 2002 la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas declara el año como Año internacional de las Montañas. En el siguiente año la Asamblea General de la ONU declara el 11 de diciembre como Día Internacional de las Montañas.
Las montañas ofrecen grandes recursos, pero los habitantes de esas zonas son pobres y vulnerables a cambios del clima, del suelo… Un tercio de la población de los países en desarrollo que reside en las montañas sufre inseguridad alimentaria y se enfrenta a la pobreza y el aislamiento. El reto para el Día Internacional de las Montañas consiste en la búsqueda de opciones sostenibles que beneficien a la población de montaña y que ayude a erradicar la pobreza sin degradar los ecosistemas montañosos.
A medida que crece la vulnerabilidad en la población, la migración aumenta tanto hacia el extranjero como hacia centros urbanos. La parte de la población que se queda y no migra suelen ser las mujeres, que se quedan al cuidado de los cultivos y el ganado. A penas poseen formación, acceso a la economía o derechos sobre las tierras. Los ecosistemas pierden sus servicios ecosistémicos y la preservación de la diversidad cultural y agrobiológica. Las inversiones y las políticas pueden aliviar las duras condiciones de vida de las comunidades de montaña y revertir las tendencias migratorias.
En esta ocasión el lema del Día Internacional es el de “Montañas bajo presión: clima, hambre, migración”. Este lema quiere destacar cómo el clima, el hambre y la migración afectan a las tierras de montaña y ofrece la oportunidad de mantener el desarrollo sostenible de las montañas para conseguir los objetivos de la Agenda 2030 y la aplicación del Acuerdo de París.
La Reunión Global de la Alianza para las Montañas ha tenido lugar a lo largo de la semana en la sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura en Roma (Italia).
Fuente: Día Internacional de las Montañas, FAO