Esta semana se ha publicado el último informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente, que presenta una descripción y un análisis actualizados de la calidad del aire en Europa de 2000 a 2016. Revisa el progreso realizado hacia el cumplimiento de los estándares de calidad del aire establecidos en las dos Directivas de calidad del aire ambiente de la UE y hacia la calidad del aire de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Según esta última, hasta el 98% de la población urbana de la UE respira aire que rebasa sus límites de contaminación.

Porcentaje de la población urbana en la UE-28 expuesta a concentraciones de contaminantes del aire por encima de ciertas concentraciones de referencia de la UE y la OMS (mínima y máxima observada entre 2014 y 2016)

 

El informe actual presenta también presenta los últimos hallazgos y estimaciones sobre la exposición de la población y los ecosistemas a los contaminantes del aire con los mayores impactos y efectos. La evaluación del estado de la calidad del aire se basa principalmente en las mediciones del aire ambiente informadas, junto con datos de modelos y datos sobre emisiones antropogénicas y su evolución en el tiempo.

Entre las principales conclusiones del informe de la AEMA, destacan:

  • Los contaminantes más problemáticos para la salud de la población europea siguen siendo las partículas en suspensión (especialmente las más finas, de menos de 2,5 micras, PM2,5), el dióxido de nitrógeno (NO2) y el ozono troposférico, si bien está aumentando la preocupación por los niveles del cancerígeno benzopireno, único contaminante que continua al alza.
  • Hasta un 98% de la población vive en ciudades donde se superan los límites recomendados por la OMS para estos contaminantes. Por su parte, los límites legales (más laxos que las recomendaciones de la OMS) se rebasan para alguno de estos contaminantes en ciudades donde vive hasta un 30% de la población.
  • Las nuevas estimaciones publicadas por la AEMA elevan hasta 27.900 las muertes prematuras producidas en el año 2015 en el Estado español por exposición a partículas finas PM2,5, 8.900 por exposición a NO2 y 1.800 por exposición a ozono, lo que supone un incremento del 22% sobre los fallecimientos estimados en el año 2014 (23.180 por PM2,5, 6.740 por NO2 y 1.600 por ozono). A nivel europeo, la situación se mantiene estable.

Air quality in Europe — 2018 report

 

Fuente: conclusiones de Ecologistas en Acción