El cromo es un metal pesado presente en el medio ambiente en diversas formas. Se encuentra en las rocas y el suelo, así como en animales y plantas. El cromo metálico es duro, quebradizo y muy resistente a la corrosión. Varios compuestos de cromo se utilizan en procesos industriales. A menudo se emplea como revestimiento de otros metales por su resistencia y propiedades estéticas, o se añade al acero como endurecedor y para obtener acero inoxidable.
Las sales de cromo se presentan en diferentes formas, siendo las más abundantes la trivalente (cromo III) y la hexavalente (cromo VI). El cromo VI se puede encontrar en pigmentos de cromato para tintes, pinturas, tintas y plásticos, inhibidores de corrosión y artículos de cuero curtido al cromo o madera tratada con arseniato de cobre cromatado. Algunos juguetes se fabrican con materiales que contienen cromo VI.
Esta hoja informativa se presenta en un formato y lenguaje que puede ser fácilmente entendido por los no especialistas, permitiendo que el lector no informado se familiarice con los temas tratados y las conclusiones alcanzadas por los Comités Científicos. Se basa en el dictamen del Comité científico independiente de los riesgos sanitarios emergentes y recientemente identificados (SCENIHR): Chromium VI in toys, de Febrero de 2015.