La próxima declaración del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama supondrá un incremento del 10% en la superficie de Espacios Naturales Protegidos en la Comunidad de Madrid. Así lo manifestó hoy el consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Borja Sarasola. De hecho, la declaración del Parque Nacional supondrá la inclusión dentro de los Espacios Naturales Protegidos de la Comunidad de otras 10.610 hectáreas. Se trata prácticamente de la mitad de las 21.714 hectáreas de superficie de Parque pertenecientes a nuestra región, y que gozarán de la máxima protección medioambiental.
"Sin duda esta es una de las mejores noticias para Madrid en materia de medio ambiente, porque sitúa a nuestra región en el mapa nacional de los espacios con la máxima protección. Nuestro Parque será el quinto en extensión y el tercero en superficie de Zona Periférica de Protección, lo que garantiza su aislamiento con respecto a las zonas urbanizadas de la Comunidad", manifestó Sarasola.
Este Parque será un modelo de representatividad, dado que en nuestra región cuenta con 9 sistemas naturales y 21 hábitats de interés comunitario, 112 especies de flora y 74 de fauna de interés, entre ellas especies en peligro de extinción, como el águila imperial ibérica y la cigüeña negra.
"Todas estas características hacen del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama un lugar muy atractivo para los aficionados al ocio de naturaleza. Esta riqueza ambiental debe ser generadora de actividad económica. El Parque Nacional tendrá un impacto económico positivo en términos de empleo, ya que la gestión del mismo promoverá la prestación de nuevos servicios y, además, propiciará un mayor desarrollo económico y social en los municipios de su entorno", señaló el consejero.
Además, señaló que la Comunidad de Madrid está ya trabajando para poner en marcha lo antes posible los mecanismos de colaboración y coordinación con Castilla y León para garantizar la gestión conjunta e integrada del Parque Nacional, así como en la elaboración del correspondiente Plan Rector de Uso y Gestión y la adscripción al Patronato, en el que estarán representados las distintas administraciones y agentes sociales, entre otros.
La declaración del Parque Nacional supondrá a todas las administraciones implicadas una inversión presupuestaria de 8 millones de euros al año, de los que aproximadamente 5 corresponderían a la Comunidad de Madrid.
Sarasola manifestó que la Comunidad de Madrid va a acometer también la necesaria adaptación de las infraestructuras ya existentes. Entre ellas citó los caminos, rutas, senderos y áreas recreativas que vertebran el territorio del futuro Parque, la adaptación de los centros de educación ambiental existentes en su ámbito y el mantenimiento y en su caso ampliación de los trabajos de investigación sobre fauna y especies vegetales desarrollados en el entorno.
"Con independencia de la ubicación definitiva del centro de interpretación del Parque, que decide el Organismo Autónomo de Parques Nacionales, queremos colaborar en la difusión de la oferta de ocio a través de nuestros tres centros de educación ambiental (Cercedilla, Rascafría y Manzanares el Real), así como la Casa del Parque Los Cotos de Peñalara, en pleno corazón del Parque Nacional", explicó el consejero regional.
Sarasola pidió la colaboración de la Cámara "para hacer del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama un referente en España y Europa, el quinto en superficie de nuestro país, con plenas garantías de protección de hábitats y especies y que, pese a lo que se empeña en decir algún diputado nacional del PSOE, prohíbe su urbanización".
El Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama tendrá una superficie total de 33.960 hectáreas, de las cuales el 64% (21.714 hectáreas) corresponden a la Comunidad de Madrid y el resto a Castilla y León. Tendrá una zona periférica de protección de 63.000 hectáreas, 30.000 en Madrid, y un área de influencia socioeconómica que incluye 15 municipios.