Los drones son el último fichaje de la Consejería de Agua, Agricultura y Medio Ambiente murciana que formarán parte de los efectivos de Vigilancia Marítima de la laguna del Mar Menor. Los dispositivos se sumarán la próxima semana a las labores de observación integral que ya vienen realizando dos embarcaciones y varios grupos a pie desde dentro y fuera de la albufera, entre los que se encuentra un Licenciado en Ciencias Ambientales.

El objetivo de esta nueva incorporación tecnológica será monitorear la coloración del agua de la laguna mediante captación de imágenes aéreas. Además se aumentarán con dos embarcaciones más los equipos de Vigilancia Marítima, compuestos en estos momentos por 19 personas.

 

Equipos de expertos

El actual operativo está integrado, entre otros especialistas, por un Licenciado en Ciencias Ambientales y patrón de embarcaciones, un licenciado en Biología, una doctora en Ecología y otra licenciada en Ciencias del Mar y marinera titulada. Ellos forman uno de los dos equipos de Vigilancia Marítima que surca el Mar Menor desde el pasado 1 de agosto. Se levantan cada día sobre las seis de la mañana para poder embarcar dos horas después. Nunca imaginaron acabar trabajando así, pero confiesan su satisfacción, «porque estamos aquí para solucionar cualquier problema ecológico».

Casi mes y medio después de que comenzasen sus labores de medición de la turbidez, la luminosidad, el oxígeno disuelto y la salinidad, sostienen que el estado del Mar Menor no presenta cambios notables. La situación, que ellos definen como «enfermedad crónica», está estancada. «Esto no se va a solucionar por tomar un paracetamol», apunta Soraya Constan-Nava, bióloga y doctora en Ecología. «Está claro que la recuperación se dará a largo plazo. De momento, con las observaciones que hemos hecho este mes, no podemos marcar una tendencia, ni para bien ni para mal», asegura. Tanto ella como sus tres compañeros de Vigilancia Marítima no tienen constancia alguna del nuevo proyecto de los drones.

En los 42 puntos de muestreo repartidos por el Mar Menor se han efectuado, en el mes de agosto, más de 14.000 mediciones, según informó la consejera Adela Martínez-Cachá. Además, los efectivos de limpieza recogieron, hasta el pasado viernes, más de 20 toneladas de basura. La consejera garantizó ayer que las labores de control de la laguna continuarán a pesar de que haya acabado el verano.

Sobre la aparición de decenas de peces muertos en Los Alcázares, achacó este suceso a la presencia de unas redes de pesca «que ya han sido retiradas». Manifestó que la forma en la que se ha actuado en este caso es «un ejemplo de que el trabajo del servicio de vigilancia es eficaz». Asimismo, aseguró que ya se ha alcanzado el 'vertido cero' en la rambla del Albujón y que ahora se persigue la recuperación de las «aguas claras».

 

Reclaman los análisis

Pese a las explicaciones de la consejera, la plataforma Pacto por el Mar Menor reclamó los resultados de los análisis realizados. Según este colectivo, la muerte de doradas y las declaraciones del director general de Transportes, Costas y Puertos, Salvador García-Ayllón, no acaban de concordar. El representante de Costas aseguró hace unos días que los niveles de nitratos y la calidad de aguas de la laguna habían mejorado. Sin embargo, la plataforma quiere asegurarse de que la muerte de los peces no tiene relación con la contaminación de la laguna.

 

Fuente: modificado de La Verdad.