El Plan de acción para la Economía Circular de la Unión Europea incluirá como prioridad el uso sostenible de los recursos hídricos y la reutilización del agua de manera segura y eficiente. La escasez de agua ha sido reconocida como un problema global y también, en consecuencia, la necesidad de establecer mejores prácticas para gestionar los recursos hídricos. Para fomentar la expansión de tecnologías seguras y eficientes de reutilización del agua, la Comisión está desarrollando requisitos comunes mínimos de calidad para la reutilización del agua en la UE.
La escasez de agua y las sequías han aumentado dramáticamente en toda la UE, y es probable que sean aún más graves y frecuentes en el futuro. El tratamiento y la reutilización de las aguas residuales es una forma de abordar la escasez de agua, extender el ciclo de vida del agua y preservar los recursos. Constituye un suministro de agua alternativo fiable y eficaz, al mismo tiempo que presenta un gran potencial para la innovación, el crecimiento y el empleo en la UE.
Según Karmenu Vella, Comisario Europeo de Medio Ambiente, Asuntos Marítimos y Pesca, "Para la economía circular, el mayor potencial está en la reutilización de aguas residuales municipales tratadas. La reutilización del agua no es sólo una ocasión para abordar la cuestión de la escasez local, sino también una oportunidad económica que las empresas de la Unión Europea podrían aprovechar aún más. El nuevo marco que proponemos fomentará un uso más amplio y seguro de esta tecnología y protegerá a las empresas contra la escasez de agua y la volatilidad de los precios. También creará empleos y oportunidades y evitará impactos negativos en el medio ambiente"
Para confirmar el compromiso de la Comisión Europea con políticas ambiciosas en materia de agua, el Vicepresidente Jyrki Katainen, el Comisario Karmenu Vella y el Comisario Phil Hogan, encargado de Agricultura y Desarrollo Rural, han firmado una declaración conjunta.
Los requisitos mínimos comunes de calidad para la reutilización de aguas residuales tratadas beneficiarían a los agricultores y a las comunidades locales en toda la UE. La reutilización del agua proporciona un suministro de agua fiable y flexible, ya que no se ve afectada por la sequía estacional y la variabilidad climática. La tecnología también es capaz de cubrir los picos de demanda de agua. Por lo tanto, los agricultores pueden confiar en la continuidad del abastecimiento de agua durante el período de riego, reduciendo el riesgo de malas cosechas y pérdidas de ingresos. La reutilización del agua también tiene un impacto positivo en el valor de la tierra, ya que permite a los agricultores utilizar la tierra ubicada en zonas con estrés hídrico. Los nutrientes existentes en las aguas residuales tratadas también pueden reducir la necesidad de fertilizantes adicionales, lo que redunda en ahorro para los agricultores.
Fuente: Retema.