Diario Información. 30/11/03

La elaboración de un diagnóstico medioambiental de las playas ilicitanas ha revelado la importancia de gestionar de forma coordinada y local el litoral ilicitano. Ésta es la principal conclusión del trabajo realizado por la licenciada en Ciencias Ambientales por la Universidad Miguel Hernández, Encarnación Hernández Lledó, quien elaboró este estudio como paso previo a la implantación de un sistema de gestión de la calidad medioambiental en las seis playas de Elche.

autor artículo:V. LÓPEZ DELTELL Tras el análisis medioambiental de la costa, la investigadora concluye que «es conveniente la creación de un órgano de gestión de playas, de carácter municipal y específico, que se encargue de llevar a cabo la gestión y ordenación turística de estos espacios».

Controlar los vertidos de residuos tóxicos o peligrosos que se puedan realizar en la costa de Elche es otra de las recomendaciones que se extraen de la investigación. Tras conocer los posibles impactos medioambientales más significativos en estos enclaves, Encarnación Hernández aconseja «que se establezca un registro de buques mercantes, transportadores de sustancias peligrosas, que transitan por las inmediaciones del litoral municipal».

Además de esta medida de control, la estudiosa recomienda otra de carácter preventivo. «Es importante establecer un plan de actuación para una posible situación de emergencia», explica Hernández.

La licenciada en Ciencias Ambientales expone que uno de los principales problemas de las playas ilicitanas es la presión turística. «El flujo de visitantes a la costa ilicitana es abundante y es necesario regular el paso de las personas para no dañar ecosistemas tan valiosos como las dunas», explica la estudiosa, quien expone la necesidad de construir pasarelas de acceso a las playas, para canalizar el paso de los visitantes, «evitando el gran número de accesos incontrolados que se producen actualmente a través de los sistemas dunares».
Por otra parte, la investigación ha detectado un exceso en los niveles sonoros derivados de la actividad humana. En este sentido, Encarnación Hernández, que actualmente trabaja como becaria en la Oficina Ambiental de la Universidad Miguel Hernández, explica que sería conveniente realizar mediciones sonoras en las seis playas ilicitanas.

El análisis ambiental realizado es el paso previo para instaurar un sistema de gestión de calidad, basándose en la norma internacional ISO-14.001. El estudio apunta que en el litoral de la Comunidad Valenciana ya existen nueve poblaciones que disponen de certificaciones ISO, obteniendo en total 14 reconocimientos, seis en calidad según la norma 9.001 y ocho en gestión medioambiental, según la ISO 14.001. Además de estas localidades, en la actualidad, un total de 17 municipios costeros de la Comunidad están llevando a cabo la implantación de un sistema de gestión medioambiental.

La investigadora concluye que «las repercusiones socio-económicas y ambientales derivadas de la implantación del modelo de gestión medioambiental en las playas serán a todas luces beneficiosas para el municipio». Elche cuenta con seis playas: El Altet, Arenales del Sol, El Carabassí, El Pinet, La Marina y Les Pesqueres-El Rebollo.Un aspecto a tener en cuenta es la posibilidad de que el municipio se acoja al programa de ayudas «Qualitur», por el que la Agencia Valencia de Turismo llega a financiar el 75% del coste de la gestión de la certificación.

Colegios Ambientales:

 
boletin sobre