Prevención en el Día Mundial de Concienciación sobre los Tsunamis

Los tsunamis son fenómenos naturales con consecuencias catastróficas. El pasado domingo 5 de noviembre se celebró el Día Mundial de Concienciación sobre los Tsunamis. Pero realmente, ¿qué conocemos de este fenómeno?

Un tsunami es una consecución de olas gigantes creadas por un movimiento del fondo del mar produciendo un desplazamiento del agua (generalmente se trata de un terremoto en el fondo oceánico o cerca del mismo). La frecuencia de las olas gigantes puede ser desde cinco minutos a una hora. Pueden llegar a 10 metros de altura y 300 metros de longitud.

La causa más común son los terremotos marinos, pero también pueden tener otras causas como una erupción volcánica submarina, un deslizamiento de tierra, la caída de rocas en la costa o el impacto de un meteorito cerca de la costa.

Los terremotos se perciben como sacudidas y temblores debido al choque de placas tectónicas. Habitualmente una placa oceánica se sumerge bajo otra placa continental u oceánica más joven. Para producir un tsunami la magnitud del terremoto debe ser de 6,5 o mayor en la escala de Richter y ocurrir a poca profundidad, menos de 70 km debajo de la superficie de la Tierra.

La caída de rocas en la costa o derrumbes pueden producir el movimiento de grandes masas de agua oceánica, provocando así un tsunami. Las erupciones volcánicas son poco frecuentes, pero bajo el mar pueden generar tsunamis desplazando un gran volumen de agua. Este tipo de tsunamis generan olas muy destructivas alrededor del volcán en erupción. El impacto de cuerpos celestes como asteroides y meteoritos cerca de las costas puede provocar olas gigantes. Aunque se han registrado muy pocos casos, existe la posibilidad de que ocurran.

La primera ola no suele ser ni la más grande, ni la más importante. Tras la primera ola, el mar se recoge dejando al aire libre grandes extensiones del fondo marino. La siguiente ola llega a tierra minutos después arrastrando restos flotantes que fueron destruidos por las olas anteriores.

¿Qué debes hacer en caso de tsunami?

Tras sentir un terremoto, aléjate de la costa y muévete lo más rápido que puedas hacia el interior, en un terreno más alto (zona de montaña). El tsunami puede cruzar masas de agua que separan a continentes, por ello debes estar atento incluso 24 horas después del terremoto. La ciudad en la que te encuentres informará de la evacuación costera a refugios seguros. Mantente alejado de ríos, arroyos y lagos.

Si ya estás viendo en tsunami lo mejor es subir a lo alto de un edificio, si no hay tiempo para subir, busca un árbol, trepa y agárrate con todas tus fuerzas. En caso de que el tsunami te haya arrastrado, busca algo que te ayude a mantenerte a flote y para protegerte de escombros flotantes que te podrían herir. Si estás en un barco, quédate en el mar ya que los efectos del tsunami son menores en alta mar que en la costa.

Mantente informado de la evolución de los tsunamis y las nuevas técnicas de detección y actuación en la web del Centro de Información de Tsunamis del Océano Índico.

Fuente: Día Mundial de Concienciación sobre los Sunamis, 5 de noviembre