España

El desaforado crecimiento urbanístico de las últimas décadas en el sur peninsular no ha sido acompañado de la construcción de suficientes puertos deportivos, con lo cual el déficit de atraques de embarcaciones deportivas desde el cabo de Palos hasta Gibraltar es alarmante. La falta de atraques deportivos provoca el florecimiento de zonas de fondeo libre estacionales en áreas de masificación turística, que a su vez causa un importante impacto ambiental como consecuencia de los depósitos de residuos que en ellos se acumulan. El proyecto Ecopuertos-Fondeo ha caracterizado estos residuos.

La falta de atraques deportivos en territorios de masificación turística en la estacionalidad estival provoca el florecimiento de áreas de fondeo presentes sólo en temporada, conocidos como “fondeaderos”; zonas en las que, con una codera o cabo de amarre a un “muerto” o fondeo de masa -habitualmente realizado con hormigón dentro de un recipiente que le da forma- las embarcaciones de recreo son dejadas en la mar durante unos meses a cierta distancia de la costa, en grandes grupos que a veces superan varias decenas de ellas.

Esta acumulación de embarcaciones causa un importante impacto ambiental en los fondos marinos de las áreas de fondeo como consecuencia de los depósitos de residuos que en ellos se acumulan, procedentes de dichas embarcaciones. Pero, además, dado que tras la temporada, las embarcaciones se estiban, se dejan las coderas, y los fondeos, y se retiran las boyas hasta el año siguiente, aunque muchas veces resulta muy difícil volver a localizar el “muerto” o fondeo del año anterior. Estos restos de cables y cabos, se constituyen en elementos de retención y acumulación de gran cantidad de residuos.

Para el apropiado estudio de dicha relación, la Sección Científica Universitaria de Buceo de Apoyo Logístico a la Investigación (SCUBA LIFE) inscrita en la Universidad de Granada, ha realizado, dentro de los estudios que lleva a cabo desde hace más de tres temporadas en la costa de Granada, el proyecto Ecopuertos-Fondeo, promovido por Ecoembes.

Durante el pasado 2018 y con varias campañas, se han analizado los 4 fondeaderos principales de la costa de Granada, en los que se han obtenido las siguientes conclusiones:

  1. El tipo de residuos predominante en todos los puntos de fondeo son “plásticos y gomas” con mucha diferencia, seguido de “vidrio, cerámica y construcción” y “metal”. Los demás tipos son minoritarios, siendo más numerosos en el punto 4 (Calahonda).
  2. La procedencia de los residuos es en su mayoría pertenecientes al consumo doméstico, residuos terrestres y de pesca deportiva con caña, habiendo en el embarcadero de Calahonda numerosísimos residuos de procedentes de los barcos de recreo.
  3. Hay una importante correlación entre el número de residuos y el de embarcaciones, a mayor número de embarcaciones en el fondeadero mayor cantidad de residuos hay, pero sin embargo, esta relación se altera por la relación inversa entre la cercanía de la masa de las embarcaciones y el número de residuos totales, ya que aquellos puntos que están muy cercanos a la costa tienen mayor número de residuos mientras que los que están lejanos a la orilla son los que presentan una menor cantidad de éstos, siendo completamente indiferente el número total de habitantes en relación a los residuos en estos puntos.

El proyecto Fondeo ha analizado por tanto los efectos perniciosos de la acumulación descontrolada de zonas de fondeo libre en ciertos puntos de la costa del mar de Alborán, provocada por la falta de atraques, extrayendo más de un centenar de residuos caracterizados en origen, y se han ligado estos hallazgos con la falta de atraques adecuados en instalaciones portuarias deportivas, que obligan a propietarios a dejar las embarcaciones en condiciones de fortuna por la falta de puertos deportivos en la costa Granadina.

Del proyecto Ecopuertos-Fondeo se ha obtenido además una guía de buenas prácticas para este tipo de zonas de fondeo, reforzando la necesidad de control administrativo sobre el número total de fondeos autorizados, el seguimiento de los fondeos o “muertos” de una temporada para otra, y la necesidad de la adecuada matriculación de los mismos.

Así mismo, se ha recomendado la ubicación de señalética adecuada en las zonas de entrada y salida de embarcaciones de negocios cercanos, etc, muy especialmente recordando la prohibición de verter residuos al mar.

De igual forma, se ha definido como absolutamente necesaria la retirada de aquellos elementos inertes como cables, cabos, amarres y corcheras, además de los restos de efectos de pesca, de los fondos, y marcando los muertos o fondeos de la zona para posibilitar su reutilización, evitando tener que ampliar el número de fondeos por falta de localización de los de años anteriores, como suele suceder.

 

Fuente: SCUBA LIFE