¿Un delineador de ojos usado que puede convertirse en flores silvestres? ¡Sí, eso es correcto! Nace Sprout Eyeliner, el primer delineador de ojos plantable del mercado.
Con más de 30 millones de lápices plantables vendidos en 80 países, Sprout World presenta en al mercado español su alternativa sostenible de un producto tradicional: el lápiz plantable delineador de ojos. Por fin ha llegado el momento de darle al delineador de ojos una nueva vida después de su uso. El delineador de ojos Sprout se puede plantar y convertir en flores silvestres. La idea es inspirar acciones más sostenibles en nuestra vida diaria.
El desarrollo de un lápiz de maquillaje plantable ha estado en marcha durante muchos años en Sprout, que tiene una patente mundial para "herramientas de escritura que puedes plantar". La compañía siempre ha querido aprovechar la patente, por lo que llegó más allá del popular lápiz Sprout, que se convierte en hierbas, verduras, flores y árboles.
Una idea que nace de sus trabajadoras
Como empresa, Sprout World está formada por un 80% de mujeres. Fue durante un taller creativo que surgió la idea de un lápiz de maquillaje plantable, y la mayoría dijo que usaban lápices de maquillaje a diario, siendo el delineador de ojos el más popular.
Rápidamente esta idea fue tomando forma dentro de la empresa. De una idea instantáneo producto de la emoción pronto se convirtió en algo tangible, lo que nos llevó a concluir que la única planta apropiada en la que podía brotar nuestro nuevo lápiz de maquillaje eran flores silvestres que eran buenas para las abejas. ¡Ahí radica nuestra idea circular para un producto de concepto circular!
Acerca del delineador de ojos Sprout
El delineador de ojos Sprout es el único en el mundo con una cápsula al final con semillas para que se pueda plantar después de su uso y convertirse en flores silvestres. El delineador de ojos patentado está probado con CA (apto para personas alérgicas), con una fórmula natural libre de microplásticos. Se agrega con aceites naturales y es bueno para la piel. Es importante destacar que devuelve algo positivo a la naturaleza y fortalece la idea de darle a un producto una "segunda vida".