El Ministerio para la Transición Ecológica presenta para su participación pública el Marco Estratégico de Energía y Clima, cuyos tres pilares esenciales son el anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética, el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030, y la Estrategia de Transición Justa.
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Los tres documentos garantizan que España cuente con un marco estratégico estable y certero para la descarbonización de su economía; una hoja de ruta eficiente para la próxima década, el Plan 2021-2030, diseñado en coherencia con la neutralidad de emisiones a la que aspiramos en 2050; y una estrategia de acompañamiento solidario y de transición justa, para asegurar que las personas y los territorios aprovechan las oportunidades de esta transición y nadie queda atrás.
El Acuerdo de París de 2015 y la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas marcan el inicio de una agenda global sostenible que conlleva la transformación del modelo económico y de un nuevo contrato social de prosperidad inclusiva dentro de los límites del planeta. En respuesta, la Unión Europea se ha dotado de un marco jurídico amplio que le permitirá mantenerse a la vanguardia en la transición y cumplir con los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero a 2030.
En este contexto, el Marco Estratégico de Energía y Clima que presenta el Gobierno, es una oportunidad para la modernización de la economía española, la creación de empleo, el posicionamiento de liderazgo de España en las energías y tecnologías renovables que dominarán la próxima década, el desarrollo del medio rural, la mejora de la salud de las personas y el medio ambiente, y la justicia social.
Se facilita una transformación de la economía española en la que el país ganará en prosperidad, seguridad energética, generación de empleo industrial, innovación, salud, desarrollo tecnológico y justicia social, acompañando a los colectivos más vulnerables. El marco orienta el tejido empresarial español hacia el lugar donde van a estar las ventajas competitivas en el futuro: innovación y capacidad de producir con mayor eficiencia y con una huella ambiental baja o nula, reforzando la competitividad nacional e internacional de nuestras empresas.
España ha de posicionarse cuanto antes en la innovación, las tecnologías, y la industria punteras en un proceso de transformación que ya está en marcha en todo el mundo, con el objetivo de aprovechar al máximo las oportunidades que presenta y que sirva de palanca para la modernización y el progreso del país.
El marco de Energía y Clima va acompañado de un sólido análisis, basado en seis modelos matemáticos contrastados, en los que se han tenido en cuenta más de mil variables, y un análisis de impactos en el marco del PNIEC 2021-2030. Este análisis, demuestra que España tiene mucho que ganar en este proceso de descarbonización y arroja datos de gran oportunidad para el país, como los siguientes:
Documento explicativo del Marco Estratégico de Energía y Clima
El marco estratégico incluye el Anteproyecto de Ley de Cambio Climático, Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030 y la Estrategia de Transición Justa, que se someten al trámite de audiencia e información públicas. Los documentos para participación pública se acompañan de unas tablas para la remisión de observaciones y, en el caso del PNIEC, de una documentación complementaria que facilite su comprensión.
Es el marco normativo que constituye la herramienta institucional para facilitar la progresiva adecuación de nuestra realidad a las exigencias de la acción climática. Este texto incluye los instrumentos de cooperación institucional necesarios; herramientas de evaluación y aprendizaje; y un marco facilitador de la transición energética con cauces de integración de los diferentes sectores.
Incluye los instrumentos necesarios para optimizar las oportunidades de empleo de la transición a través de marcos de formación profesional, políticas activas de empleo, medidas de apoyo y acompañamiento –con especial atención a sectores estratégicos–, y planes de reactivación de los territorios que puedan verse afectados por este proceso para que nadie quede atrás. Además se incluyen instrumentos de reducción de la desigualdad y apoyo a los consumidores, en particular los vulnerables.
Define los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, de penetración de energías renovables y de eficiencia energética. Determina las líneas de actuación y la senda que, según los modelos utilizados, es la más adecuada y eficiente, maximizando las oportunidades y beneficios para la economía, el empleo, la salud y el medio ambiente; minimizando los costes y respetando las necesidades de adecuación a los sectores más intensivos en CO2. Es un documento programático que debe presentarse a la Comisión Europea para su evaluación y que será debatido con los distintos agentes en España a lo largo de 2019.
Desde el Ministerio para la Transición Ecológica aclaran que solo se tomarán en consideración las observaciones realizadas a los documentos señalados como de participación pública y remitidas a través de las correspondientes tablas elaboradas a tal efecto en los buzones que a continuación se enumeran. El plazo expira el 22 de marzo de 2019.
Fuente: Ministerio para la Transición Ecológica