El consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Borja Sarasola, soltó ayer en el embalse de Santillana dos ejemplares de galápago europeo equipados con transmisores, lo que permitirá a los científicos realizar un seguimiento de sus movimientos en el Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares, en el que se encuentra una de las colonias reproductoras de este reptil en la región.
"La Comunidad de Madrid es un verdadero refugio de diversidad de flora y fauna", afirmó el consejero Sarasola, "dado que en su superficie, que representa sólo el 1,6% del territorio nacional, se encuentra más de una tercera parte de todas las especies de flora española y el 40% de su fauna".
El 50% de las principales especies de vertebrados terrestres y continentales de España están representados en la Comunidad, y es especialmente llamativa su riqueza en anfibios y reptiles. Así, Madrid es la cuarta comunidad autónoma con mayor número de anfibios (con el 64% de las especies peninsulares) y tiene más especies que países enteros como Suecia, Holanda o Reino Unido. También reúne 24 especies autóctonas de reptiles, el 52% de las especies peninsulares, cuatro veces más que Suecia, el triple que el Reino Unido o el doble que Alemania, lo que convierte a la Comunidad en un territorio clave para su conservación.
En la Comunidad, el galápago europeo está catalogado como en peligro de extinción, por lo que los datos que aporten los ejemplares hoy liberados permitirán al Gobierno regional poner en marcha medidas específicas de conservación y protección de los lugares que elijan para alimentación, reproducción e hibernada.
Protección de la biodiversidad
Sarasola señaló que "la Comunidad de Madrid trabaja para proteger las especies de reptiles y anfibios que enriquecen la biodiversidad de nuestra región, que se erige como un territorio clave para la conservación del galápago europeo, una especie protegida para la que el Ejecutivo regional desarrolla un programa para su preservación, protegiendo su hábitat y estudiando sus poblaciones".
Las dos hembras de galápago europeo (Emys orbicularis) liberadas hoy en el embalse de Santillana fueron capturadas en el Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares, el mismo entorno en el que han sido liberadas, y que cuenta con dos núcleos reproductores: el ya mencionado de Santillana y el del embalse de El Pardo.
El galápago europeo habita en pequeñas lagunas, arroyos y colas de los embalses. Busca siempre aguas limpias en hábitats sin contaminación, por lo que su presencia es un indicador del buen estado de salud de los ríos y embalses de la Comunidad. Los arroyos y humedales del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares permiten, gracias a su buen estado de conservación, la presencia de una población estable reproductora. A lo largo de los dos próximos años, expertos de la Asociación Herpetológica Española realizarán el seguimiento de los ejemplares liberados hoy por el consejero y que están equipados con emisores de radiofrecuencia, para descubrir datos relevantes para la conservación de esta especie de reptil referentes a su hábitat, y conservar y proteger los lugares en los que viven, se reproducen e hibernan.
Programa de protección desde el año 2000
La Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio tiene en marcha desde el año 2000 un programa de protección del galápago europeo, que incluye el censo y estudio de las poblaciones, la protección de sus lugares de puesta y la adecuación de charcas para su reproducción, además del control y captura de especies invasoras como el galápago de Florida, que desplaza al europeo de su hábitat y merma sus poblaciones.
Dentro de este programa, se ha actuado en la colonia del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares, la más amenazada por estar más fragmentada y contar con menos individuos. En junio de 2013 y en colaboración con la Asociación de Herpetología y GREFA, se liberaron 15 galápagos europeos en Colmenar Viejo, en una zona de charcas a caballo entre los embalses de El Pardo y Santillana, los dos núcleos reproductivos de la colonia, con el objetivo de crear una nueva población que sirva de enlace entre ambas, aumentando el número de individuos en el Parque y la variabilidad genética de los grupos.
Desde el año 2007 se han establecido además planes de captura de galápago de Florida, especialmente en las zonas en las que se ha detectado un núcleo de galápago europeo, dado que su presencia expulsa a la especie autóctona de su hábitat natural.