La utilización de materias primas provenientes de residuos para fabricar otros productos es una alternativa cada vez más viable y más visible. Es es caso de las encimeras ecológicas, que aportan un valor añadido con el uso de elementos reciclados. Se trata de una fabricación innovadora de las encimeras de cocina, y representa un viaje hacia la economía circular que busca alargar la vida útil de las materias primas, dándoles circularidad, recuperándolas en lugar de desecharlas, y transformando el residuo en recurso de nuevo.
Silestone ECO line es una superficie creada a partir de materiales reciclados compuesta de al menos un 50% de materiales reciclados (espejo, vidrio, porcelana, gres porcelánico y cenizas vitrificadas) tanto de productos finales como de procesos productivos. El 50% restante, como la propia casa remarca, se trata de materiales que aunque no son reciclados, son ecológicos en cierto sentido. Así se utilizan cuarzos y sílices no aprovechados por cortes de otras industrias o piedras provenientes de escombreras, con lo que la reutilización es integral. Como ligante de todos estos materiales se utiliza una resina ecológica, cuya composición deriva en parte del aceite de maíz.
Entre las ventajas, el fabricante destaca la eliminación de desechos en vertederos, la reducción del uso de energia y agua a la hora de crear nuevas materias primas, oportunidad de devolver la vida a productos inservibles, reducción en el uso de fuentes naturales y deforestación, minimización de las emisiones en todas las fases de producción y que todos los elementos son reutilizables.
ECO Line está avalado por certificaciones internacionales que confirman el esfuerzo realizado por el fabricante para conseguir una superficie reciclada verdaderamente sostenible. Entre las certificaciones y acreditaciones están:
Fuente: Comunicae y Silestone ECO.