Las tres empresas constituirán una nueva compañía como centro de desarrollo conjunto y se llevarán a cabo proyectos de colaboración para el desarrollo conjunto de tecnologías estructurales básicas para vehículos eléctricos. El acuerdo abarca desde automóviles de pequeño tamaño a turismos, todocaminos y comerciales, innovando en el proceso de desarrollo y combinando las fortalezas de cada compañía.
A medida que países y regiones de todo el mundo adoptan políticas cada vez más estrictas para ayudar a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, empiezan a surgir nuevas normativas que exigen una cierta proporción de vehículos eléctricos (EV) en las ventas. Para cumplir esas normativas medioambientales, y hacer posible al mismo tiempo el crecimiento sostenible de las compañías, es preciso desarrollar una amplia gama de motorizaciones y tecnologías. Toyota, Mazda y Denso ven en los vehículos eléctricos un ámbito tecnológico clave en este proceso, junto a los vehículos de pila de combustible.
Mientras los EV luchan aún por una aceptación generalizada en el mercado, las enormes inversiones y el tiempo necesario para cubrir todos los mercados y segmentos de vehículos son una cuestión apremiante para los distintos fabricantes de automóviles en su respuesta a la demanda ampliamente variable de vehículos en todo el mundo.
Mazda, Denso y Toyota han decidido desarrollar de forma conjunta tecnologías estructurales básicas para EV capaces de cubrir una amplia variedad de segmentos y tipos de vehículos con los que garantizar una respuesta flexible y rápida a las tendencias del mercado.
Este acuerdo abarca un abanico diverso de modelos, desde automóviles de pequeño tamaño a turismos, todocaminos y comerciales, y aspira a innovar en el proceso de desarrollo combinando las fortalezas de cada compañía, como la planificación de productos agrupados y los avances en el desarrollo basado en el modelado informático de Mazda, las tecnologías electrónicas de Denso y las estructuras derivadas de la Nueva Arquitectura Global de Toyota (TNGA).
La nueva empresa se encargará de:
La arquitectura común es el concepto básico de diseño de producto para alcanzar el rendimiento necesario de los productos repartiendo los requisitos correspondientes entre los componentes estructurales. Bajo el concepto de una arquitectura común, la estructura básica de cada componente puede también ser común, yendo más allá de las diferencias de categoría y potencia de los vehículos. Al organizar las características de los componentes, se pueden desarrollar y fabricar varios productos siguiendo el mismo proceso.
A través de este proyecto conjunto de desarrollo tecnológico, al dedicar la misma cantidad de recursos de desarrollo, garantizando procesos eficientes de desarrollo y aprovechando las instalaciones de producción existentes, Mazda y Toyota se proponen concentrar sus recursos en valores fundamentales de los vehículos para hacer posible la creación de vehículos eléctricos atractivos, respetando las identidades únicas de cada marca.
Las compañías pretenden asimismo crear una estructura empresarial abierta a la participación de otros fabricantes de automóviles y proveedores.
Fuente: Toyota prensa.