La reforma eléctrica del Gobierno ha puesto en jaque al sector de la cogeneración en España. Los recortes del nuevo modelo retributivo que el Ejecutivo ha diseñado para las energías del antiguo régimen especial (renovables, residuos y la propia cogeneración) ha hecho de algunas instalaciones hayan dejado de ser rentables y las ha abocado al cierre.
La Asociación Española de Cogeneración (Acogen), la patronal que representa a las industrias que utilizan el calor sobrante de sus procesos de producción para generar electricidad, confirma que los recortes han hecho de 2014 un año trágico para el sector.
Según la asociación, durante este año han echado el cierre para siempre un centenar de plantas de cogeneración en España (un 10% del total) y alrededor de otras 170 han suspendido su actividad al menos temporalmente: las 999 instalaciones activas que había el año pasado se han convertido en 632 durante este ejercicio, un 37% menos.
Durante este ejercicio, el parón de actividad se ha traducido en un recorte de un 20% de la producción anual, hasta los 26 TWh; al tiempo que la potencia instalada se reducía un 27%, hasta sólo 4.328 MW, según los datos de Acogen, que hoy ha celebrado en Madrid su Asamblea Anual. Y los cierres pueden no haber terminado.
"Con un 20% de caída de la producción y un 10% de las plantas definitivamente cerradas, prácticamente la mitad de las industrias del sector permanecen a la espera de conocer el final de la implementación de la nueva normativa para decidir si pueden continuar produciendo o definitivamente paran su actividad al resultarles imposible compensar el incremento de sus costes energéticos", ha explicado Javier Rodríguez, director general de Acogen.
La reforma cuesta 973 millones
La patronal sector calcula que el impacto económico de la reforma eléctrica ascienden a 973 millones de euros al año, "inasumibles para la industria asociada". De ese montante, 576 millones corresponderían a la bajada de los precios de venta de la electricidad y los otros 397 millones, al pago de los nuevos impuestos a la venta de la electricidad generada y a la compra de los combustibles empleados.
Acogen, en paralelo, recuerda que a ese golpe de 973 millones habría que añadir las deudas del sistema eléctrico con los cogeneradores (que en algunos momentos han llegado a ascender a 250 millones) y los 328 millones en ayudas percibidas entre julio de 2013 y mayo de este año que el sector debe devolver por haber cobrado de más.
"En un país con bajísimo índice de industrialización -menos del 15% del PIB-, que debe acometer un programa para impulsar la industria hacía el objetivo europeo del 20% del PIB, se toman medidas que minan la productividad de un amplísimo sector industrial como el manufacturero", se quejan desde la asociación. "El marco actual de la cogeneración industrial asfixia a las empresas, incrementando sus costes de fabricación y dificultando las exportaciones", ha sentenciado su presidente, José Manuel Collados.
Fuente: Expansión.com