El programa “Más alimento, menos desperdicio” para la reducción de las pérdidas y el desperdicio alimentario y la valorización de los alimentos desechados, ha visto una reciente actualización que transcurrirá entre 2017 y 2020. Esta iniciativa, que surgió en 2013, se ha revisado para proponer ocho áreas de actuación, con las que se quiere cubrir todos los aspectos que se necesitan para abordar el problema que supone el desperdicio alimentario.
Es una iniciativa que quiere canalizar las de todas las partes y aglutinar los agentes implicados en la reducción del desperdicio alimentario. Este es un nuevo periodo para el proyecto, que quiere continuar cuantificando el desperdicio alimentario en todas las fases del proceso, así como la necesidad de contar con la colaboración de consumidores, productores, empresas, asociaciones, entidades, etc. Así como el compromiso político, que supone un apoyo imprescindible para asegurar un avance decisivo en la lucha contra el desperdicio alimentario. Siguiendo con su Plan de acción, se ha creado la Plataforma UE para las pérdidas y el desperdicio de alimentos, con objeto de avanzar en la consecución del ODS 12.3, aprovechando al máximo la acción efectiva de todos los actores a través del intercambio de experiencias y mejores prácticas, basadas en evidencias, resultados y aprendizaje.
Estas ocho líneas de actuación, que se están llevando a cabo para conseguir la meta propuesta en la Estrategia son:
Este proyecto está en línea con las políticas de sostenibilidad y con las iniciativas comunitarias y mundiales en favor de la sostenibilidad y el desarrollo, enmarcándose en las actuaciones del Paquete de Economía Circular y del cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible. Este tipo de iniciativas suponen una gran esperanza para lograr la transformación del sistema económico y pasar de un sistema lineal a un sistema circular, en el que el desperdicio alimentario no exista y nuestra forma de consumir sea totalmente consciente con nuestros propios actos, teniendo en cuenta que todo lo que hacemos tiene consecuencias en el planeta. Que sean consecuencias negativas o positivas sólo depende de nosotros mismos.
Estrategia “Más alimento, menos desperdicio" 2017-2020
Fuente: eco circular