Oceana presenta Oceana MedNet, la primera red completa de Áreas Marinas Protegidas (AMP) para el Mediterráneo que detalla localizaciones específicas. La propuesta recoge 100 lugares distribuidos a los largo de toda la cuenca que cubrirían una extensión superior a los 200.000 km2. Con esta superficie sumada a las AMP ya existentes, se lograría proteger hasta un 12% del Mediterráneo y se superaría el mínimo establecido por el Convenio sobre la Diversidad Biológica de las Naciones Unidas (CBD).
A pesar de estar considerado como uno de los principales focos de biodiversidad marina del planeta, el Mediterráneo (2.500.000km2) no está muy lejos de la situación global y a fecha de hoy sólo el 4% de su superficie está protegido. Esta protección está concentrada en la franja costera (con excepción del Santuario del mar de Liguria, 87.500km2) y en la orilla norte de la cuenca, dejando una ausencia total de protección para los espacios de alta mar y la orilla sur. Por tanto, la red actual de AMP no es representativa ni coherente.
En el año 2004, desde la Conferencia de las Partes del Convenio sobre Diversidad Biológica se estableció el claro objetivo de proteger de forma efectiva al menos 10% de regiones marinas de mundo para 2012. Hoy, no sólo estamos lejos de alcanzar el objetivo, sino que ha sido pospuesto para 2020 ante la pasividad y aceptación de los gobiernos. Actualmente, apenas un 1% de los océanos del planeta está protegido, y la tendencia global actual en la declaración de AMP evidencia una trayectoria insuficiente y a un ritmo tan sumamente lento, que los mínimos se alcanzarían en el año 2067.
Con la propuesta que Oceana presenta, se pretende dar un impulso en la consecución de este objetivo mediante la aplicación del Enfoque Precautorio recomendado por diferentes organizaciones internacionales, no sólo bajo un enfoque de conservacionista, sino también desde el punto de vista de conservación de recursos pesqueros.
Oceana MedNet se compone de una amplia variedad de lugares, entre los que se contemplan montes submarinos, bancos, cañones, escarpes, fosas, dorsales, volcanes de fango, emanaciones gaseosas, montes carbonatados, etcétera. Estos hábitats son menos conocidos que praderas de fanerógamas o arrecifes de coral, pero no menos relevantes. Las figuras propuestas son consideradas por el CBD como lo suficientemente importantes desde el punto de vista biológico y ecológico y requieren de una protección efectiva.
Puedes ver el Borrador del informe: Oceana MedNet (en inglés) o descargarte el Archivo Oceana MedNet para Google Earth.